Una asociación cuyo propósito es promover la industria de la jubilación tiene como objetivo atraer a 150.000 estadounidenses y canadienses a Quintana Roo en los próximos cinco años a través de la construcción de nuevas urbanizaciones adaptadas a las necesidades de los jubilados.
Javier Govi, presidente de AMAR, dijo que la organización ya ha mantenido conversaciones con las cadenas hoteleras Iberostar y Mayakoba sobre el desarrollo de proyectos residenciales en el norte del estado caribeño.
Dijo que AMAR también está involucrada en la construcción de dos torres residenciales en Cancún cuyo mercado objetivo son los ricos jubilados norteamericanos, y agregó que ha firmado un acuerdo con la Asociación de Profesionales de Bienes Raíces de Cancún para unir fuerzas y desarrollar infraestructura dirigida a la misma comunidad. Incluyen centros médicos especializados e instalaciones recreativas.
Govi dijo que los estudios realizados por AMAR muestran que los ingresos de las personas que viven en áreas donde hay comunidades internacionales de jubilados son 1,5 veces más altos que el promedio como resultado del gasto de los jubilados en los bienes y servicios que necesitan.
Añadió que los residentes también se benefician del gasto en infraestructura urbana dirigida a las personas mayores, como las rampas de acceso a la movilidad.
AMAR estimó hace tres años que había unos 27.000 extranjeros jubilados viviendo en México, con un ingreso de 223 millones de dólares. Se prevé que esta última cifra aumentará a 1.370 millones de dólares para 2030.
El sur de Quintana Roo también parece beneficiarse de una mayor afluencia de jubilados. La compañía canadiense K & A Associates anunció a principios de este año que construirá un proyecto médico-residencial de 400 millones de dólares en la capital del estado, Chetumal.