Hidralia, la empresa que gestiona la red de abastecimiento de Estepona, está alertando a la población y a los residentes más alejados de la Costa del Sol, diciendo que sus trabajadores no entran en los hogares de las personas, ni para reparar fugas ni para hacer inspecciones.
Pero ha habido informes de personas con ropa similar que se acercan a los dueños de las casas.
«Estas personas intentan acceder al interior de la casa con el pretexto de reparar una fuga de agua y revisar las tuberías», advirtió Hidralia en un comunicado.
Añadió que las posibles fugas internas se detectan por la diferencia entre las lecturas de los medidores. Si el consumo es superior al normal, la empresa lo notifica a los hogares mediante una carta.
El comunicado agregó que las fugas internas son responsabilidad de los propietarios, no de Hidralia, por lo que no entran en el recinto.
La gente no debería dejar entrar a los «inspectores de agua» en sus casas y debería notificar a la policía, concluyó la declaración.