Diarios españoles han puesto al alcance de la población la noticia sobre la familia expulsada de un restaurante. La experiencia de estas personas ha sido conocida tanto en Europa como fuera de allí. Ha generado polémica y diversas críticas, naturalmente. Pero además ha encendido las alertas de muchas organizaciones en contra de la xenofobia.
- ¿Dónde y por qué ocurrió el evento?
El suceso sobre la familia expulsada tuvo lugar en Ripoll, localidad de Gerona. Aparentemente los encargados del restaurante se negaron de modo rotundo a servirles comida. ¿La razón? Un simple polo que uno de los miembros traía puesto y que contenía la bandera de España.
- La negación de los encargados
Bastantes periódicos españoles y de otros países han intentado contactar a los encargados. No obstante, los mismos han rechazado cualquier entrevista. Afirman que no les interesa hablar con medios de ningún tipo acerca del hecho. Esa es la declaración tras la cual les han colgado a todos los diarios que los han llamado.
- Doble crítica
Por si no fuera ya suficiente el asunto de la familia expulsada, resulta que algunos otros españoles han sufrido. Hace poco un joven comentó en sus redes sociales que él y sus amigos también fueron maltratados.
Señala, en sus publicaciones, que una de las motos que utilizaban tenía una bandera de España. Y esta fue razón suficiente como para que los encargados no quisieran atenderlo ni a él ni a sus colegas. A este respecto, los dueños han tildado de chusma al joven.
- Defensa del restaurante
Según los encargados del restaurante, la familia expulsada se fue por su propio gusto. A decir de su versión, lo único que pasó es que el cocinero se sentía nervioso ante la bandera. Así, se lo comunicó, y las personas abandonaron el local.