Trece universidades españolas se encuentran entre las 500 primeras del Ranking Académico de Universidades del Mundo 2019 (ARWU), publicado el jueves por ShanghaiRanking Consultancy.
Esta influyente lista, que ayuda a dar forma a las políticas educativas de muchos países, muestra una ligera mejora con respecto al año pasado, cuando España contaba con 10 centros en el ranking de los 500 mejores.
La Universidad de Barcelona es la primera de las 13 instituciones de enseñanza superior españolas en formar parte de la lista, con un rango de 151-200. La Universidad Autónoma de Barcelona, la Universidad Complutense de Madrid y las universidades de Granada y Valencia se sitúan en el grupo de los 200-300.
La Universidad Autónoma de Madrid y la Pompeu Fabra de Barcelona se sitúan entre los puestos 300 y 400, mientras que la Universidad Politécnica de Valencia y las universidades de Oviedo, Sevilla, Baleares, País Vasco y Zaragoza se sitúan entre 400 y 500.
Fuentes académicas españolas subrayan la gran diferencia de financiación y señalan que las universidades públicas sufrieron recortes presupuestarios de 9.500 millones de euros entre 2010 y 2018. Las universidades españolas también se ven frenadas por una cultura del mecenazgo (el 73% de los profesores enseñan en el mismo centro en el que obtuvieron su doctorado), y por un profesorado formado por personal de edad avanzada con contrato indefinido y por jóvenes educadores con empleos precarios.